A la hora de planificar el trabajo de calidad de
un proyecto, tenemos que tener claras las fechas clave de negocio que se irán
cumpliendo a lo largo del año en el proyecto. Esto nos dará una serie de
momentos puntuales que debemos de cubrir con procesos extraordinarios de
validación que asegurarán la calidad y nos darán la tranquilidad necesaria.
En esas fechas clave, será necesario ir pivotando tiempos con las diferentes personas de calidad del proyecto para poner foco a las diferentes validaciones a realizar. Esto se completará con que el equipo de negocio aporte un calendario razonable y que cubra estas necesidades especiales.
Lo ideal, es que teniendo conciencia de estas
fechas clave, tengamos un calendario de despliegues a producción al uso, que
puedan pararse durante esas fechas o ser aprovechados para dejar estable una
versión en concreto de cara a los clientes.
Las acciones o procesos a realizar deberán de
estar ya planificadas de antemano y en muchos casos ya realizadas para ser utilizadas
durante los años posteriores, pudiéndose optimizar o aumentar a razón de las
necesidades en ese momento.
Para mi existen tres acciones indispensables: la
realización de una serie de pruebas de carga especiales y adaptadas a ese
momento, una automatización de las principales acciones que van a realizar los
clientes y un apoyo manual en base a una serie de baterías de prueba que ya
tengamos especificadas y de las que seamos consecuentes al uso y utilización de
las funcionalidades que cubran.
El apoyo manual será necesario ya que
existirán procesos y acciones que no podrán ser automatizados por las características
de la funcionalidad, además de que, hay que realizar el circuito lógico de
acciones al menos una vez, de la misma manera que lo harían los clientes, cosa
que automatizando, en algunos casos, no podríamos cubrir.
Otro de los puntos que podemos tener preparados
de antemano, son las pruebas de carga. Estas se encargarán de darnos el
feedback sobre el estado de las pantallas con el nivel de carga de usuarios en
ese momento puntual, pudiendo adelantar una posible caída del sistema
introduciendo más recursos en la plataforma o realizando las acciones
necesarias para que no tengamos caídas o problemas en el mismo.
Lo ideal para este tipo de procesos en el equipo de trabajo es adelantarse a las situaciones y tener preparadas estas pautas,
esto nos aportará un valor enorme dentro del proyecto y la sensación de
estabilidad en la plataforma de cara a los clientes será muy positiva y si no,
recordar cuando intentáis comprar entradas en un concierto muy popular...habitualmente,
la página se cae si o si, esto lo evitaríamos con este tipo de soluciones ya
que sabríamos los límites de la plataforma y podríamos pivotar carga de datos
entre máquinas o servidores, además de que cumpliendo los caminos que realizan los
clientes de manera automática o manual, sabemos con total certeza si el
funcionamiento es correcto o vamos a dar muchos quebraderos de cabeza a los
usuarios finales.
Tenemos que ser conscientes que una calidad
adecuada es sinónimo de felicidad y tranquilidad.
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